Hablar en público suele resultar una tarea donde se pasa un mal trago. Si no tienes dotes naturales y se te da bien, suele ser difícil tener una buena oratoria. Sin embargo, es algo que se puede entrenar y, por tanto, mejorar con un curso de oratoria
En realidad, durante muchas facetas de nuestras vidas acabamos necesitando de la oratoria. Sin darnos cuenta, desde muy pequeños, en edad escolar, hemos tenido que usar nuestras dotes de oratoria. Cuando nos han pedido salir a la pizarra a responder a una pregunta frente a la clase, estamos siendo un orador a la fuerza de las circunstancias. No digamos en el bachillerato, donde es habitual tener que exponer los trabajos realizados delante del resto de los compañeros.
La oratoria es algo más que una herramienta de comunicación. Debe considerarse una habilidad a trabajar y a entrenar. En el ámbito profesional puede ser clave a la hora de mejorar nuestro desarrollo profesional y nuestra carrera. Pero también podemos destacar en el ámbito académico y en nuestras relaciones sociales, cuando logramos dominar este recurso de comunicación tan antiguo como el mismo lenguaje.
¿Qué importancia tiene la oratoria en la educación?
Pensamos que el buen orador se limita al oficio propio de ciertas profesiones como la de político o la del conferenciante universitario. Aunque si nos detenemos a pensar, ese recurso cuando se utiliza con eficacia y se domina tanto ha sido por haber recibido formación específica. Por eso, debemos dar importancia a la oratoria como herramienta para los alumnos en los distintos niveles educativos y para los profesores de cara a realizar clases más efectivas.
El docente que domina la oratoria será mejor entendido por sus alumnos. Un estudiante que logra exponer las ideas desarrolladas en sus trabajos con claridad será un mejor alumno. En el mundo académico y de la enseñanza la oratoria desempeña un papel mucho más importante de lo que nos parece. Expresar de un modo efectivo los conocimientos, los datos y las ideas, resulta fundamental en el ámbito educativo. Tanto para el profesor que los transmite como para el alumno que luego debe asimilar esa enseñanza.
Como estudiante debes entrenar tu capacidad de oratoria, siendo así capaz de expresarte de manera clara y convincente en las exposiciones orales, debates y discusiones en el aula. Esta habilidad te permite destacar mejorando tu expediente académico. Así, como alumno mejoras tu capacidad de investigación y persuasión de tus teorías expuestas. También fomenta la confianza en uno mismo. Haciendo más grata tu etapa educativa.
Como profesor, un buen dominio de la oratoria te permite atraer mejor la atención e interés de tu alumnado. Además, la oratoria fortalece las habilidades de escucha activa, permitiendo a los estudiantes comprender y sintetizar información de manera más productiva.
«De hombres es equivocarse; de locos, persistir en el error»
«Somos esclavos de las leyes para poder ser libres»
(Frases de Cicerón, orador y filósofo romano que vivió en el siglo I a.C.)
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