Aunque lo parezca, exactamente el HUMOR NEGRO no es el reverso del HUMOR BLANCO. El humor negro hace humor con elementos negativos o macabros. No evita como el blanco temas que puedan herir sensibilidades, aunque se centra en temas que no suelen ser muy tratados por el gusto del público. Temas como la muerte o las enfermedades graves, poco atractivos, sirven para originar fuertes ironías o sarcasmo que creen situaciones humorísticas.
El humor negro es el tipo de humor que busca la paradoja. Es aquel capaz de buscar el lado «gracioso» a momentos o situaciones que no lo pueden ser, por su extremo carácter de seriedad. Situaciones que por sí mismas se entienden dolorosas o trágicas, un entierro por ejemplo, pero que pueden llegar a contener una perspectiva humorística que logre desdramatizarlas.
De todas formas, al crearse en entornos con formalismos sociales ceñidos al respeto y a la seriedad, más que una risa de carcajada, este tipo de humor suele provocar una sonrisa cómplice 😉
Recursos y elementos como la parodia, el sarcasmo y la ironía, suelen predominar en el humor negro. Además se juega con la crueldad, por lo que muchas veces se enfrenta a los límites de las normas sociales y su moralidad. Eso puede convertirlo en un tipo de humor polémico y no siempre bien recibido por muchas personas. Se ha relacionado, además, con el llamado «Humor Inteligente» que necesita de una mayor agilidad mental. Digamos que el «humor negro» tiene su público.
Os contamos un par de «chistes negros» y os dejamos una web para conocer más… si queréis, claro, porque no son aptos para todos los públicos 😉 🙂
«Mi novia, hablando de astronomía, me preguntó cómo mueren las estrellas. «Normalmente por sobredosis», le dije»
«Su humor era tan negro que le disparaba la policía»
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