¡Eh, escucha! Te contamos los mejores cinco disfraces fáciles de hacer para Halloween
Con el número 1 el clásico pero no menos interesante ¡la BRUJA!
Quizás sea tu personaje favorito y no quieras darle más vueltas al disfraz que vayas a llevar en Halloween. Por eso te proponemos el disfraz de bruja. No tienes que ser una chica para hacerlo, que conste. Los chicos también podéis usar este divertido disfraz. Lo primero que debes hacer es el característico sombrero de copa en forma de punta.
Para hacer ese sombrero te recomendamos cartulina negra. Haz un tubo con la cartulina y en un extremo debes cerrar más para que acabe en punta. Usa una cinta o trozo de cartulina para hacer la base del sombrero más ancha. Luego la ropa de bruja debe ser negra también. Busca un vestido viejo de tu madre o tuyo de ese color o bien oscuro. Añade algún adorno. Puede ser un remiendo, que parezca ropa vieja o puede ser una media luna y estrellas… ¡Ah, no te olvides de la escoba! 🙂
Con el número 2 otro disfraz habitual y fácil de hacer, ¡la MOMIA!
No hace falta ser muy listo para «inventar» este disfraz con cosas de casa 😉 Puede ser papel higiénico del baño o puede ser una sábana blanca vieja y que puedas romper para hacer las vendas que te cubrirán todo el cuerpo. ¡Ah! Recuerda hacer unos agujeros para los ojos y la boca cuando te cubras la cabeza 😉 🙂
Un último consejo para este disfraz. Si te dejas las manos sin vendar porque son más difíciles de hacer, dibuja sangre y heridas en ellas. Los pies puedes ponerte calcetines blancos 😉
Con el número 3 un disfraz tan fácil de hacer que te vas a reír, ¡FANTASMA!
Quizás el disfraz más fácil de hacer del mundo mundial. Todos podemos encontrar una sábana vieja y hacerle dos agujeros para los ojos. Ya está, no le des más vueltas. Fiable y seguro, un disfraz sencillo pero muy, muy divertido con el que podrás hacer el ¡FANTASMA! todo el día de Halloween.
Con el número 4 de cinco disfraces fáciles de hacer para Halloween tenemos al ¡PIRATA!
Vamos, rápido, sube a bordo del barco fantasma lleno de ¡PIRATAS FANTASMAS! Este, quizá, sea algo más complicado de hacer porque requiere maquillaje. Seguro que en casa tienes alguien que sepa maquillar, o tu mamá o algún hermano mayor. Aunque igual sabes tú maquillarte y crear una cicatriz fea en tu cara. También puedes pintarte de calavera, para ser pirata-esqueleto-fantasma. Todo en uno ¡Jeejeee! 😉
Si no quieres complicarte no hagas sombrero, haz un sombrero-pañuelo atado a un lado con un lazo. Puedes completar tu cara con un parche negro, que mejor deberías comprar si nadie mayor en casa te puede hacer uno. Piensa que hay que coser o usar materiales cortantes para realizar un parche bien hecho. La ropa sería más fácil. Recomendamos busques una blusa amplia que puedas atar a la altura de tu barriga 😉 y unos pantalones que pueden ser ceñidos o anchos… nunca vaqueros, ¡los piratas no llevaban pantalones vaqueros! 😉 🙂
Y con el número 5 el disfraz fácil de hacer menos fácil de hacer 😉 ¡el COCODRILO!
¿En serio que no te parece terrorífico ir disfrazado de cocodrilo? Si has visto Peter Pan, al Capitán Garfio lo que más miedo le daba era el ¡COCODRILO, TIC-TAC-TIC-TAC! Además, si algún amigo va de pirata podéis hacer pareja 😉 de miedo. En fin, te doy varias ideas y luego te las apañas tú a tu manera, pues la imaginación que uses seguro que será mejor que la de nadie 🙂
Busca ropas verdes claras y oscuras de distintas tallas para ir haciendo escamas. Si te resulta más complicado, compra una cartulina verde clara y otra verde oscura. Así puedes hacerte las escamas del cuerpo de manera más sencilla si no cuentas con tanta ropa verde 😉 Haz semicírculos o círculos que luego doblas. La cabeza es lo más divertido. Haz un rectángulo con cartón verde (o normal y le pintas tú escamas verdes) y en un extremo, debajo, pintas o recortas unos dientes blancos afilados. Recortarlos o pintarlos, según te sea más fácil.
¡Ah!, debes hacerte una larga cola de escamas, que recuerda debe salirte del cu… 😉 y que puede ser de tela o cartulina. Sería también una parte más complicada de hacer, pide ayuda en casa, pero con cartulinas suele quedar bien si te limitas a pegar las «escamas» recortadas de mayor a menor en fila india hasta hacer la cola de cocodrilo tan larga como tú quieras. Intenta reptar, arrastrarte alguna vez en la fiesta, te hará un cocodrilo más creíble… 😉 🙂
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